Una buena iluminación es muy importante en cualquier habitación de nuestra vivienda y en el salón también porque es, junto con la cocina, de las estancias más utilizadas. Un salón bien iluminado te permitirá desarrollar todas las actividades allí de forma más cómoda y acogedora.Aunque también dependerá del tamaño del salón y de la entrada de la luz natural, lo que debes tener en cuenta cuando iluminas el salón es muy sencillo:
Busca lámparas y accesorios de iluminación que te permitan generar distintas posibilidades de iluminación.
Lo ideal es poder combinar tres tipos de iluminación en el salón: general, ambiental y puntual.
La iluminación general da una luz pareja para todo el salón y no genera sombras. Esta iluminación central la puedes lograr con una lámpara de techo o con apliques empotrados generando varios puntos de luz.
La luz general se coloca en la zona central donde también suelen situarse la mesa o el sofá, si no utiliza para esta zona una lámpara colgante a media altura, ni muy alta ni muy baja.
La iluminación puntual es para lograr destacar ciertas zonas u objetos, desde una vitrina o biblioteca hasta un cuadro.
La luz led es muy brillante y la puedes usar para destacar un rincón del salón, al igual que los halógenos que dan una luz blanca intensa.
La iluminación ambiental es más sutil y genera un juego entre luces y sombras que es útil para delimitar diferentes zonas del salón.
Para esta iluminación puedes usar lámparas de pie o de mesa en muebles auxiliares que también son perfectas si tienes una zona de lectura en tu salón.
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