Cómo injertar rosas

En los países tropicales, el verano o la época de sequía es la mejor época para injertar rosas. Esto se debe a que es la temporada ideal para que la savia fluya fácilmente dentro de la planta, un requisito indispensable para que el injerto de rosas sea exitoso.

Ahora bien, en los países con cuatro estaciones, la primavera y el otoño resultan las mejores épocas para injertar rosales. En estas épocas del año, la corteza se levanta con facilidad sin dañar al receptor, obteniendo, así, los mejores resultados.

Hay otros tipos de injertos, como el de tipo escudete, a los que les favorece el verano, pues los nutrientes cuentan con mejor circulación durante esta estación.

Si quieres conocer más detalles acerca del cuidado de las rosas, visita nuestro artículo Cómo y cuándo podar las rosas.

En esta sección, te indicamos cómo injertar rosas paso a paso. Uno de los principales pasos que debes tomar en cuenta antes de injertar rosas es que debes regar previamente los rosales. Por otra parte, debes tener una navaja afilada para hacer cortes de buena calidad y no dañar ninguna de las partes al momento de hacer el injerto. Antes de realizar los cortes, recuerda desinfectar la navaja.

El tipo de injerto que te mostramos a continuación se llama injerto de escudete. Para que logres hacerlo exitosamente, sigue las siguientes instrucciones:

1. Riega los rosales donde harás los injertos.
2. Prepara el patrón receptor del injerto. Para ello, realiza una incisión en el tronco o rama en forma de “T”, de unos 2 cm de ancho y 2,5 cm de alto. Esta incisión debe hacerse, como mínimo, por encima de los 4 cm del suelo.
3. Abre los lados de la corteza hacia afuera.
4. Prepara la yema que vas a injertar. Corta la rama que contenga las flores de donde extraerás la yema para quitar parte de la madera que sobra. A esta rama se le llama el vástago o brote. La rama debe tener unos 6 mm de diámetro.
5. Injerta la yema dentro del patrón, haciendo que coincidan y que queden en contacto la yema y la corteza del patrón.
6. Amarra el injerto con rafia o nylon, de tal manera que, al empezar a crecer, pueda salir con facilidad. Deja el capullo descubierto.
7. Pasados unos 10 días, quita el amarre para que la nueva planta empiece a crecer libremente y con éxito. Un indicador de que el injerto fue exitoso es que puedas ver el peciolo de las hojas, luego de unos 15 días.
8. Cuando el injerto tenga más de 10 cm, corta por completo la parte superior del patrón.
9. Si el injerto se hizo en un patrón plantado en maceta, lo debes trasplantar a un jardín al año siguiente para que se convierta en un rosal nuevo y crezca con nuevas ramas y flores.

Si, en cambio, estás plantando un rosal desde cero y no sabes cómo empezar, no dudes en leer nuestro artículo Cómo plantar un rosal.

A través de los injertos de esquejes de rosales, puedes obtener una gran cantidad de rosas de diversos colores en un mismo rosal. Para ello, solo necesitarás aplicar la técnica del injerto de hendidura. Descubre cómo injertar rosas de diferentes colores a través de los siguientes pasos:

1. Escoge el rosal donde harás los injertos.
2. Desinfecta la navaja y las tijeras de jardinería que utilizarás.
3. Escoge los esquejes de rosales de rosas de diversos colores. Quítales todas las hojas y espinas. Los esquejes deben ser de las ramas que contengan las flores.
4. No dañes los nudos de los esquejes, pues de allí, saldrán las ramas nuevas.
5. Deja, como mínimo, 3 nudos en cada uno de los esquejes.
6. Escoge las ramas patrón donde realizarás los injertos.
7. Corta desde la punta del patrón hacia abajo unos 20 cm de manera horizontal.
8. Quítale las hojas y espinas a los patrones.
9. Haz un corte vertical, por toda la mitad del patrón y hacia abajo, de aproximadamente 3 cm de profundidad.
10. Toma cada uno de los esquejes y hazles 2 cortes de 2 cm en uno de sus extremos. La punta debe quedar en forma de paleta, con la parte blanda de la rama al descubierto.
11. Injerta los esquejes en los patrones, de tal manera que las partes blandas queden en contacto.
12. Toma una cinta de embalar y ata cada uno de los injertos, de forma que no se caigan y no les entre humedad.
13. Forra los esquejes con cinta, tratando de que los nudos no queden cubiertos.
14. Si los injertos continúan verdes luego de 2 semanas, ¡el proceso ha sido un éxito!
15. Espera 20 días y quita la cinta de todos los esquejes.

En nuestro artículo Cómo cuidar un jardín de rosas, te contamos más secretos para que tengas un jardín hermoso y puedas disfrutar de rosales saludables todo el año.

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