¿Tienes un montón de trastos que ya no utilizas en casa? Si eres de esas personas que acumula y guarda todo tipo de aparatos en el garaje o el trastero y estás pensando en deshacerte de ellos, lee detenidamente este artículo. En unComo.com te explicamos cómo organizar un mercadillo en casa. ¡Anímate! Está práctica está muy extendida en los países anglosajones y, con ella, en lugar de tirar todos tus objetos acumulados a la basura y generar multitud de residuos podrás intercambiarlos, abastecer y hacer un servicio a gente más necesitada, además de colaborar con el medio ambiente.
Coordina un grupo de trabajo. Será un poco difícil organizar un rastrillo tú solo, así que busca a un grupo de amigos o vecinos que deseen colaborar con esta causa. Además, ellos también podrán aportar objetos que deseen intercambiar o vender de segunda mano.
Infórmate de si necesitas algún tipo de permiso o licencia para montar el mercadillo, sobre todo si lo haces en algún exterior como el jardín o los espacios comunes de la comunidad. En caso que fuera necesario, pide permiso a tu comunidad de vecinos.
Abastécete con todo lo necesario. Además de los trastos viejos que donaréis, venderéis e intercambiaréis, procura tener a mano bolsas de plástico para poner los objetos vendidos, rotuladores para marcar los precios, carteles que señalen dónde se ubica el mercadillo, cajas para colocar los trastos, así como una calculadora y una libreta de cuentas. ¡Todo saldrá sobre ruedas!
Publicidad. Si deseas tener un buen volumen de ventas, es imprescindible que la gente sepa qué día, a qué hora y en qué lugar se realizará el rastrillo. Puedes anunciarte en el diario local o colgar carteles en espacios culturales u otros. Además, ahora puedes utilizar las redes sociales como Facebook o Twitter para difundir tu mercadillo casero. ¡Capta clientes!
Una vez lo tengas todo listo, empieza la recolecta. Busca en las estancias de tu hogar, en los trasteros, garajes y armarios todo aquello que ya no utilices. Recuerda que debe ser útil para otras personas. Si encontráis algo roto o en mal estado, indicadlo en la etiqueta y rebajad el precio, así la persona que desee adquirirlo lo tendrá en cuenta. Si vas a poner en el rastrillo ropa, asegúrate de que está limpia.
Prepáralo todo a conciencia. Piensa que la gente vendrá a adquirir los trastos por el menor precio posible. Aprende la técnica del regate de precios y sobretodo, diviértete con tus colaboradores organizando este mercadillo en casa. ¡Te encantará!
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